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marzo 09, 2008

LA MAGIA DEL 64 (I)

El número 64, para los discípulos de Pitágoras representaba el difícil camino que da acceso a la perfección.

Se compone del 6; que para los pitagóricos era el único número adaptado al alma, la unión distintiva de las partes del universo y lo llamaban “la perfección de las partes”. Representa al matrimonio pues contiene 3 veces al número par (2) y 2 veces al número impar (3), lo cual simboliza la íntima fusión de vínculo.
Para los griegos era el número habitual en el que dividían sus figuras geométricas y según la religión de los druidas, este número era excepcionalmente importante, sus ceremonias más importantes eran celebradas en el sexto día de la luna y allí comenzaba su año. Las hierbas sagradas eran recogidas en el campo por 6 labradores. También los egipcios solían agrupar a sus sacerdotes de 6 en 6.
De acuerdo con la tradición popular de los antiguos griegos, el sexto día de cada mes es especialmente beneficioso para que nazca un hijo varón, pero poco propicio para realizar la siembra. En geometría corresponde al hexaedro o poliedro regular, pero también admite la figura del doble triángulo, que es el símbolo de la estrella de David de los judíos que, como se sabe, tiene 6 puntas. Es un número benéfico porque también es una forma de representación de Dios en sus dos estados trinitarios, el manifiesto y el no manifiesto. También se lo considera el número de la divinidad en movimiento.

Y del 4, en la antigüedad, la mayoría de los pueblos se referían a Dios mediante nombres de cuatro letras como el Deus latino o el alemán Gott. Para los árabes, lit belleza femenina se analizaba de 4 en 4 entre los componentes del cuerpo de la hembra. Cuatro son las series o clases (le cartas del Tarot, 4 las principales casas del horóscopo en el zodíaco y 4 los evangelistas (San Juan, San Lucas, San Marcos y San Mateo). Para los masones los 4 elementos básicos para el hombre (tierra, aire, fuego y agua) se hallan por gnomos, sílfides, dragones y sirenas.
El hombre se halla rodeado de 4 animales, que simbolizan sus 4 edades (infancia, juventud, madurez, vejez). Cuatro son las estaciones del año, 4 los cuartos o fases de la luna y 4 los puntos cardinales. Si nos remitimos al profético libro del Apocalipsis, encontramos que son 4 las partes en las que se divide la tierra, 4 las bestias con ojos, 4 los caballos, 4 los ángeles del Éufrates.
El 4, número activo, es la tétrada y así como el 1 simbolizaba al Padre, el 2 a la Madre y el 3 al Hijo, este número simboliza a la familia. Como es la repetición de la unidad y también de la díada (2), es el producto tanto de uno como del otro. De este modo genera la casta, la tribu, la familia, la reproducción.
Para los pitagóricos era de tal modo sagrado que juraban en su nombre. Para los hindúes había 4 principios inferiores (las pasiones, el cuerpo inferior, el cuerpo astral y la esencia de la vida) y 4 clases de ajusticiamiento: lapidación, estrangulamiento, cremación y decapitación. Es el número de la cruz cósmica, los extremos del madero de la crucifixión y las puntas de la cruz gamada.

La suma de 6 + 4 da 10 que es el primer número compuesto (1 y 0), el primero de 2 cifras y el fundamento del sistema decimal por el que desempeñamos nuestros cálculos habituales. Es la base de la numeración mágica y, para los pitagóricos, la suma de los conocimientos humanos al ser “la nueva unidad”, el equivalente a 1 (que es Dios) como base del sistema decimal: 10 unidades forman la “la nueva unidad”. Esta, repetida 10 veces da 100; 10 veces 100 da 1000 y así indefinidamente.
Para los cristianos primitivos simboliza la ley puesto que la ley de Dios se compone de 10 mandamientos. Se le llamaba “número universal” y por contener a todos los restantes, se consideraba como una representación de la eternidad. Al estar compuesto por el 1 que significa Dios y el 0, la nada, encierra en sí la totalidad. Para Pitágoras, la década mística se componía de la suma de los 4 números primos: 1 + 2 + 3 + 4 = 10
Su significado era el siguiente:

1 es Dios
2 es la materia
3 es el mundo físico
4 es la reproducción
10 es la totalidad del cosmos
Es un número activo, correspondiente a La rueda de la Fortuna y negativo desde la perspectiva lunar. Los griegos lo llamaban panteleia, es decir “lo completo, lo realizado” y entregaban a los dioses la décima parte de sus botines de guerra.
Para los mahometanos, hay sólo 10 animales admitidos en el paraíso. Los antiguos rabinos sostenían que un hombre podía divorciarse de su mujer si ésta no le había dado descendencia en los 10 primeros años de matrimonio. Había 10 plañideras en los entierros y 10 jóvenes acompañando al esposo en las bodas. Diez milagros se hicieron en Egipto, en ayuda de los israelitas y otros 10 en el mar Rojo.
Los judíos ofendieron 10 veces a Dios en el desierto y Moisés fue probado 10 veces. Los pitagóricos sostenían la existencia de 10 pruebas iniciáticas y para los budistas la enseñanza de los 10 Mundos provee la base para entender la verdadera naturaleza de la vida y los 10 factores: "apariencia, naturaleza, entidad, poder, influencia, causa interna, relación, efecto latente, efecto manifiesto y su consistencia de principio a fin"; describen el patrón de existencia común a todos los fenómenos.

64 es además la potenciación de 8 (8 X 8). Este número simboliza la igualdad. Según Pitágoras, designaba la ley natural, porque es el primero que puede dividirse en 2 números cuadrados iguales (4 y 4). En hebreo es Heth y en griego Eta, cuyo valor es similar a nuestra CH. La tradición popular asigna que soñar con él es un aviso de futura pérdida de dinero. Para los griegos, el octavo día era el mejor para encontrarse con los buenos amigos, pero para los egipcios, el día 8 de cada mes estaba relacionado con el pago de diezmos o impuestos. Se le considera habitualmente con un día próspero, salvo para cuestiones financieras. En los arcanos mayores del Tarot señala a Temis, el equilibrio.
En las antiguas creencias, este número ha tenido singular importancia. El griego Dionisios lo tenía por valor sagrado pues había nacido en el octavo mes. Los hijos varones de los judíos eran circuncidados en el templo al octavo día de su nacimiento y en la fiesta de Janucah se encendían 8 velas. Ocho fueron las almas salvadas del Arca de Noé y él fue el octavo que salió del arca. Su propio nombre significa “ocho veces ocho”.
A través de la escritura sánscrita y luego de la árabe, su trazo ha llegado a nosotros como un simbolismo gráfico muy similar al de infinito:

8 ∞
Esto resulta lógico pues se considera que simboliza la unión del espíritu con la materia.